Niños/as y jóvenes continúan aprendiendo a sentir gracias a los talleres en Estrella Azahara

La misión de Estrella Azahara es ofrecer una educación integral a todos los participantes que son atendidos en diferentes proyectos. Uno de los proyectos que se han desarrollado a lo largo del 2024 recibe el nombre de “Aprendiendo a sentir”, y está financiado por la Consejería de Inclusión Social, Juventud, Familias e Igualdad a través de fondos #Nextgeneration. Este proyecto se compone de varias actividades dirigidas al impulso del desarrollo de hábitos y conductas saludables positivas en la infancia y adolescencia, y vela por llevar a cabo acciones preventivas para potenciar las competencias emocionales básicas entre los menores atendidos. Con la finalidad de dar respuesta a estos objetivos, se han llevado a cabo distintos talleres enfocados en el control y manejo del estrés, la gestión emocional, la asertividad, la paciencia y la inteligencia emocional. Estos talleres, diseñados con mucho cariño y dedicación y en colaboración con varios grupos de estudiantes de la Universidad de Córdoba, están siendo una experiencia única tanto para los participantes como para los educadores.

Durante todo este año, los jóvenes que cursan estudios de la ESO, han tenido la oportunidad de aprender a identificar y gestionar el estrés en su vida cotidiana. A través de actividades prácticas, dinámicas grupales y técnicas de relajación, logran reconocer los factores que generan tensión en sus estudios y relaciones, así como estrategias para enfrentarlos de manera saludable.

Por otro lado, se han llevado a cabo una serie de actividades interactivas que permiten a los niños y niñas más pequeños explorar y comprender sus emociones de una manera divertida y accesible. A través del uso de material del “Monstruo de las emociones” diseñado para ayudar a los más pequeños a identificar y comprender sus sentimientos de manera lúdica y educativa, los niños están aprendiendo a identificar sus sentimientos, a expresarlos de manera adecuada y a desarrollar herramientas que les ayuden a manejar situaciones desafiantes en su vida diaria.

Uno de los aspectos más destacados de estos talleres ha girado en torno a la asertividad. Los jóvenes han tenido la oportunidad de practicar cómo comunicar sus necesidades y deseos de manera clara y respetuosa, lo que no solo fortalece su autoestima, sino que también mejora sus relaciones interpersonales. Mediante la puesta en práctica de actividades en grupo, se puede observar cómo van adquiriendo seguridad al expresar sus opiniones.

La paciencia, un valor fundamental en la vida, también ha sido un tema importante en estas sesiones. A través de diferentes actividades y dinámicas, los participantes aprenden a calmar su mente y a ser más conscientes de sus reacciones emocionales. Este enfoque les ha permitido desarrollar una mayor tolerancia a la frustración y a entender que, a veces, las cosas requieren tiempo y esfuerzo.

La inteligencia emocional ha sido otro pilar clave en estos talleres. Los menores han explorado cómo sus emociones afectan su comportamiento y cómo pueden utilizar esta comprensión para tomar decisiones. Al fomentar la empatía y la conexión con los demás, se ve un crecimiento notable en su capacidad para relacionarse con los compañeros y resolver conflictos de manera pacífica.

Gracias a la ejecución de estas actividades dinámicas y divertidas, los participantes de este proyecto muestran cómo poco a poco van aumentando su autoconfianza y una mejora positiva en su capacidad para gestionar sus emociones.